Como les comenté en la introducción, la noticia de que vamos a ser padres nos llegó inesperadamente. Aquí les va más o menos cómo fue la historia... tranquilos que no les vamos a contar cómo lo engendramos sino desde más adelante. Jajaja!
Desde mediados de febrero venía sintiéndome medio mal casi a diario y esa sensación aumentaba conforme pasaba el tiempo; ya a finales de mes empecé a dudar que eso fuera normal porque hasta el olor del chocolate (que me encanta comer) me repugnaba... el domingo 2 de marzo me empecé a preocupar en serio porque calculé y ya se me estaba retrasando "la visita" y atando cabos el susto fue empeorando, inclusive pensé que si me daban ganas de vomitar era sólo psicológico. El hecho es que venía pasando por todo esto sola, hasta que ese día domingo le comente a Marcos, dándole tantas explicaciones y pronósticos encontrados que ni siquiera le di chance para hablar, sólo recuerdo que le dije: Para salir de dudas quiero comprarme una prueba de embarazo. Sorprendido y con una sonrisa en la cara me dijo que aprovecháramos ese mismo día.
Ya en la farmacia, cuando llegó el momento en que la íbamos a comprar, me entró un susto tremendo y me puse a llorar, pero las palabras de apoyo e ilusión que me dijo Marcos me tranquilizaron muchísimo.
Decidimos hacer la prueba instantánea de orina el lunes en la mañana y ahí salió el resultado: +, es decir, POSITIVO. El quería estar sobreseguro a pesar de lo que dijo el examen, así que me hice el de sangre en la clínica y salió NEGATIVO. O sea, más contradictorio imposible, pero confiamos más en el último porque supuestamente es más "garantizado". La doctora se sorprendió y me dijo que saliéramos de la duda con un eco, así que el lunes siguiente (10 de marzo), UNA SEMANA DESPUÉS, con un retraso larguísimo y yo casi segura de que íbamos a tener un retoño, fui y en el ecosonograma salió... un pequeño embrión de 4 a 5 semanas. Yo estaba en shock, temblaba, no sabía si reírme o llorar. Me fui a darle la noticia en persona a Marcos y su cara fue un poema, los dos estuvimos impactados todo el día. Pero se nos fue pasando el susto y ya nos empezamos a adaptar, con decirles que él está monísimo con la idea de que estemos embarazados.
Gracias por visitarnos y contamos con sus buenos deseos y que nos manden las mejores energías en esta etapa que iniciamos.
Desde mediados de febrero venía sintiéndome medio mal casi a diario y esa sensación aumentaba conforme pasaba el tiempo; ya a finales de mes empecé a dudar que eso fuera normal porque hasta el olor del chocolate (que me encanta comer) me repugnaba... el domingo 2 de marzo me empecé a preocupar en serio porque calculé y ya se me estaba retrasando "la visita" y atando cabos el susto fue empeorando, inclusive pensé que si me daban ganas de vomitar era sólo psicológico. El hecho es que venía pasando por todo esto sola, hasta que ese día domingo le comente a Marcos, dándole tantas explicaciones y pronósticos encontrados que ni siquiera le di chance para hablar, sólo recuerdo que le dije: Para salir de dudas quiero comprarme una prueba de embarazo. Sorprendido y con una sonrisa en la cara me dijo que aprovecháramos ese mismo día.
Ya en la farmacia, cuando llegó el momento en que la íbamos a comprar, me entró un susto tremendo y me puse a llorar, pero las palabras de apoyo e ilusión que me dijo Marcos me tranquilizaron muchísimo.
Decidimos hacer la prueba instantánea de orina el lunes en la mañana y ahí salió el resultado: +, es decir, POSITIVO. El quería estar sobreseguro a pesar de lo que dijo el examen, así que me hice el de sangre en la clínica y salió NEGATIVO. O sea, más contradictorio imposible, pero confiamos más en el último porque supuestamente es más "garantizado". La doctora se sorprendió y me dijo que saliéramos de la duda con un eco, así que el lunes siguiente (10 de marzo), UNA SEMANA DESPUÉS, con un retraso larguísimo y yo casi segura de que íbamos a tener un retoño, fui y en el ecosonograma salió... un pequeño embrión de 4 a 5 semanas. Yo estaba en shock, temblaba, no sabía si reírme o llorar. Me fui a darle la noticia en persona a Marcos y su cara fue un poema, los dos estuvimos impactados todo el día. Pero se nos fue pasando el susto y ya nos empezamos a adaptar, con decirles que él está monísimo con la idea de que estemos embarazados.
Gracias por visitarnos y contamos con sus buenos deseos y que nos manden las mejores energías en esta etapa que iniciamos.
1 comentario:
Hola
Es gracioso el cuento de los resultados contradictorios de las pruebas (supongo que menos gracioso mientras ocurría, pero bueno ahora se pueden reir de ello).
Felicidades y mis mejores deseos para los orgullosos padres y para ese regalo del cielo que no tardará en llegarles.
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